El viento mueve sin tregua las
hojas de las palmeras; tan distinto al baile de los olivos. ─Se agitan en mi
cabeza lamentos de recuerdos─. Suave cadencia de aceitunas frente a la locura
de las puntiagudas hojas de la costa. Hoy el viento arrastra el salitre y me
recuerda lo lejos que quedan aquellos mares de árboles serenos.
¡Hasta la próxima desconexión!
2 comentarios:
Siempre sucede algo que agita nuestros recuerdos. Tal vez el aire que mueve las hojas trae fragancias que desatan esos recuerdos.
Será esta vez el salitre... de olor salobre...
pero no sé nada de mares de árboles serenos aunque sí de mares arbolados, que no son los más aconsejables.
A todo esto... me gusta el texto, aunque me salga un pareado.
Un beso.
· LMA · & · CR ·
Ñoco, es que a ti te sale el arte sin quererlo. El salitre escuece en algunas heridas que no sanan.
Un abrazo.
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