Cuando era más joven las ideas bullían en mi cabeza
peleando por ser las elegidas, ahora es como si tuviera que perseguirlas,
pistola en mano, para que tras en una cruel batalla, salgan a la blanquecina
luz: asustadas y en retazos.
Escribir unas pocas líneas cuesta más que subir
las escaleras que te acercan al "Gran Buda" de Ping Ngong, termino
agotada y temblorosa; como si intentara sacar un cubo lleno de agua de un pozo
ya seco. Aun así, cuando menos lo espero una chispa prende (una frase, una canción,
una noche en vela...) y allí está; tal vez no a borbotones pero sí como un
reposado caudal que muestra que aún no se secó. Soy yo quien coloca un dique
donde antes había una cascada. Continúo preguntándome el por qué, pero mientras
encuentro la respuesta sigo intentado extraer agua del pozo, cansándome y
reponiéndome ya que nadie puede negar la certeza de que se necesita "agua"
para vivir.
¡Hasta la próxima desconexión!
4 comentarios:
¡Oh, muy buena entrada!
A mí me está pasando algo parecido, aunque en realidad no por falta de ideas, sino porque estos días salgo tan tarde del trabajo que al llegar a casa ya no tengo ganas de hacer nada, solo descansar. Gracias a Dios, la semana que viene todo de regreso a la normalidad, y ahí sí, a seguir escribiendo.
PD: tremenda la foto del Gran Buda :)
Crow86. Gracias. El agotamiento físico es preocupante pero el psicológico, para esto que, intentamos hacer tú y yo, es funesto. A ti te queda mucho carrete aún, yo no me preocuparía.
El Gran Buda es genial, ya te enseñaré alguna otra.
Besos
Tú siempre encontrarás esa agua. No caves pozos que esa fantástica agua está dentro de ti. Agítate con ritmo y saldrá a borbotones.
Ya estoy de vuelta... Te iré visitando...
Un beso sin desconectar.
· LMA · & · CR ·
Ñoco!!! Cómo te he echado de menos. Qué bien que está de regreso. Siempre deseando recibir tu visita.
Un beso de cristal
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