miércoles, 13 de enero de 2016

ESTACIÓN: “LA ISLA”




La puerta se abre y me acomodo en el asiento más cercano al conductor del metro. Enciendo el ipod y el ebook. A mi lado, una chica embutida en unos breves shorts desbloquea su móvil y hurga en la pantalla con avidez, sabedora de que pronto no tendrá conexión. Arrancamos, suspira y lo apaga. Observa de reojo para saber qué leo; su curiosidad me agrede y giro la muñeca para que no pueda verlo. Acoge la indirecta con naturalidad. Salvado el escollo, agradecidas, regresamos a nuestro vagón del silencio.

Hasta la proxima desconexión.